Avistamiento de ballenas, la conservación a la vista
BY: guillermoperez
Ver ballenas jorobadas en la bahía de San Carlos, en Baja California Sur, ha sido una de las experiencias más maravillosas de mi vida y una recomendación fija para cualquiera que me pregunte qué actividad se puede hacer para estar en contacto con la naturaleza. Una experiencia, por mucho, inigualable. Y lo mejor es que no necesitas ser biólogo, naturalista o algo similar para maravillarte y sentirte pequeño o pequeña ante la magnitud de estos animales marinos.
Aunque nos lo parezca, esta experiencia está lejos de ser algo común. En tiempos pasados la caza indiscriminada casi acabó con las poblaciones de ballenas y dio origen a movimientos ecologistas que alertaron a las autoridades sobre la importancia de estos animales, su rol en el ecosistema, y se consiguió la determinación de una moratoria por parte de la Comisión Ballenera Internacional que regula su caza, de la cual México es parte desde 1949. Gracias a ello, muchas de las poblaciones de ballenas alrededor del mundo estén recuperándose.
Lo anterior es una demostración de que cuando nos ponemos de acuerdo, los seres humanos podemos lograr revertir los daños que le ocasionamos al planeta; lo mismo debería pasar con el cambio climático, pero ese es otro tema.
Para que podamos seguir disfrutando de la presencia de ballenas en nuestro país lo primero que debemos hacer es proteger sus hábitats, aquellas zonas que les permiten alimentarse, reproducirse y pasar el invierno junto a sus crías en aguas mexicanas. Para ello es importante destinar grandes extensiones de mar a la conservación y establecer santuarios en sus sitios de agregación, como la reserva de la biosfera del Vizcaíno, en Baja California Sur.
Existe un gran consenso científico en que si lográramos proteger el 30 % de los océanos del mundo en zonas claves para la biodiversidad, podemos conservar los procesos ecológicos que sostienen la vida en el planeta y con ello resguardar de buena forma los hábitats marinos que permiten a ballenas, tortugas, tiburones y todos los grandes animales emblemáticos de la biodiversidad marina, perpetuarse de manera futura. En el caso de México protegemos el 22.3 % de nuestro mar en 37 Areas Naturales Protegidas (ANP) y, según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), solo alrededor de 7 % de los océanos del mundo se encuentra actualmente en alguna categoría de área marina protegida (AMP).
La agenda está marcada a nivel nacional e internacional, debemos seguir aumentando área a la conservación como primer paso para asegurar el futuro de los océanos y de las personas que dependen de las actividades relacionadas a la pesca, quienes requieren océanos abundantes de vida para su actividad. Decretar más Áreas Naturales Protegidas es solo el primer paso y debe hacerse de manera equitativa, con una mirada de justicia ambiental que impulse los esfuerzos de conservación de las comunidades que viven y aprovechan estos territorios. Lo segundo y más importante es asegurarnos de que funcionen y para ello necesitan el personal y financiamiento adecuando para dicha tarea.
Desde Oceana, la mayor organización del mundo destinada exclusivamente a la protección del océano, en estos casi 5 años de presencia en México hemos reforzado la necesidad de que existan más zonas destinadas a la conservación y que estas sean eficientes y funcionales. Así hemos destacado las necesidades de mayor protección en Arrecife Alacranes, te hemos mostrado las maravillas de los arrecifes de Bajos del Norte en la Península de Yucatán y hemos sido críticos sobre la gestión de las actuales Áreas Naturales Protegidas y sus áreas de oportunidad.
Disfrutar del avistamiento de ballenas es solo una de las tantas actividades que puedes hacer para maravillarte con el océano, pero sin duda es una de las más impactantes que puedes hacer. Solo la podrás disfrutar si como sociedad somos capaces de cuidar y proteger los hábitats relevantes para que se puedan seguir alimentando y reproduciendo a través de estas zonas de protección.
El llamado a la autoridad es claro: preservar más y mejor nuestros océanos.
*Atarraya de Miguel Rivas, director de la campaña de Santuarios Marinos en Oceana en México, publicado el 09 de febrero de 2023 en Animal Político.