¿Cómo ser un consumidor responsable de pescados y mariscos? - Oceana México
Inicio / Blog / ¿Cómo ser un consumidor responsable de pescados y mariscos?

March 15, 2022

¿Cómo ser un consumidor responsable de pescados y mariscos?

 

La humanidad ha vivido del mar por miles de años, pero hace apenas unos siglos (con el desarrollo de la pesca industrial) que podríamos estar tomando más de los mares de lo que pueden darnos. Como consecuencia, al menos 34% de las poblaciones de peces en el mundo se encuentran sobreexplotadas, según la Organización Mundial para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Este porcentaje es mayor en México, donde 4 de cada 10 especies se encuentran sobreexplotadas. 

Actualmente en el mundo se pescan 97 millones de toneladas de pescados y mariscos, mientras que la acuicultura genera otros 82 millones de toneladas, y se prevé que la cifra continúe aumentando mientras la población mundial crece. Así que, ¿cómo disminuir la presión sobre nuestros mares?  

Ciertamente, nada sustituye nuestra obligación de exigir a autoridades y corporaciones que regulen y mejoren sus prácticas para frenar la devastación de los océanos. Sin embargo, mucho se puede lograr a través de nuestro consumo. Pero para ello hay que saber qué, dónde, cómo y cuándo consumir. Puedes hacerlo siguiendo estos consejos: 

Consume productos nacionales 

Esto no solamente te garantizará pescados y mariscos más frescos, sino que te permitirá involucrarte con los mares de donde se obtienen. De esa forma es más viable conocer el tipo de pesca local, la sostenibilidad de sus métodos, los problemas de sus aguas y de sus pescadores, que dice mucho de la salud de sus aguas. 

Además, consumir productos nacionales permite reducir emisiones de carbono del transporte: no es lo mismo comer un salmón de acuicultura de Chile, que ha sido traído a México en grandes barcos de carga impulsados con combustibles fósiles por miles de kilómetros, que un robalo pescado en las costas de Guerrero y transportado sólo unos cientos de kilómetros. 

Consume en comercios establecidos y autorizados 

Una de las mejores formas de evitar la pesca ilegal es comprar en comercios establecidos como pescaderías, restaurantes, cooperativas pesqueras y supermercados, en donde no sólo se revisa la legalidad de los productos, sino también su salubridad, la correcta calibración de las básculas con las que los pesan y las denuncias de usuarios afectados por malas prácticas. 

Dado que los puntos de venta establecidos están sujetos a revisiones periódicas de las autoridades comerciales, es más difícil que practiquen la venta ilegal que un lugar sin licencia ni revisión.  

Consume de acuerdo a las temporadas 

La captura de especies marinas en sus momentos de reproducción afecta a sus poblaciones y la estabilidad de sus ecosistemas. Por eso es crucial respetar las temporadas de veda a la pesca de ciertas especies. Es importante aclarar que la veda es para la pesca y no para el consumo, pues existen algunos productos que se congelan y pueden estar disponibles en cualquier época del año, aunque se vuelve más difícil de encontrar y por ello los peces y mariscos resultan más costosos para el cliente final. Infórmate sobre las especies disponibles en distintos momentos del año. 

Aprovecha todo lo que puedas del pescado 

El desconocimiento de los pescados y mariscos, y la erosión de nuestras culturas culinarias nos llevan comúnmente a consumir sólo los filetes de un pescado y desechar el resto; sin embargo, tanto la cabeza como los huesos y las vísceras son una importante fuente no sólo de sabor, sino de nutrientes . 

Con estos restos se pueden hacer caldos, guisados, salsas y aderezos que se traducen en un mejor aprovechamiento de los recursos marinos y un menor desperdicio de la economía personal y del hogar. 

Diversifica tu paladar

En México hay más de 700 especies de pescados y mariscos que se pescan y comercializan que puedes probar. Intenta sabores nuevos y deja de pedir lo que tradicionalmente conocemos como huachinango, robalo, mero, etc. Esto pone menos presión por un recurso único y valora nuestra diversidad biológica y gastronónomica. 

Sabemos que, desgraciadamente, no es posible seguir estas recomendaciones al pie de la letra, ya que en México los distribuidores de productos del mar no son obligados por las autoridades a informar de todas estas características en sus productos, como sí ocurre en otras partes del mundo. Por lo tanto, es imposible saber de dónde viene el pescado o cómo fue capturado. 

Ante esta situación, Oceana en México insiste en la necesidad de tener una Norma de Trazabilidad que incluya la información necesaria para que las y los consumidores tengamos la posibilidad de conocer el recorrido de nuestro pescado desde que se pesca hasta que llega a nuestra mesa.